jueves, 27 de agosto de 2015

¿y yo, por qué escribo?

Escribo por que me gusta, lo primero,
segundo y tercero vienen detrás.
Escribo por que te quiero
y no me importa nada más.
Escribo porque las letras crean mi vida,
porque mi vida está hecha de letras.
Escribo por que lo siento
los fallos, errores y demás catástrofes.
Escribo por que me siento
¿viva?
Siento, después de todo.
Escribo por que me llena,
por que me ayuda a verte.
Escribo, no para que me leas
sino para conocerme yo.
Escribo porque sé lo que se siente,
sé como cuatro palabras mal dichas
te
hacen
vivir
de nuevo
y otra
vez
más.
Por que con dos frases perfectamente colocadas,
hacemos tres versos y una estrofa a la vez.
Por que no me importa si canciones, poemas o la nada.
Por que lo que importa se me escapa,
de las manos, de la mente, de corazón.
Nunca supe saltar sin coger carrerilla,
tampoco dividir sin coger calculadora,
pero aquí estoy, con un esguince de tobillo y algo menos de dinero.
Escribo, escribo y escribo.
¿y tú? ¿por qué escribes tú?

domingo, 3 de mayo de 2015

La alienación económica

Marx atribuye el concepto de alienación a la circunstancia en la que vive toda persona que no es dueña de sí misma, ni es la responsable de sus acciones y pensamientos. En resumen, es la condición en la que vive la clase oprimida en toda sociedad de explotación en toda sociedad que admite la propiedad privada de los medios de producción. Además distingue entre la alienación económica y la alienación religiosa. La alienación económica es la principal forma de alienación porque de ella dependen todas las demás. Esta situación se da en el trabajo y consiste en que el sujeto productivo (el trabajador) sufre una expoliación del producto de trabajo, es decir, que al estar tan metido en su trabajo y deberselo tomar excesivamente enserio, debido a que en esta sociedad(capitalista) el hombre debe trabajar no para realizarse como persona sino solamente para ganar dinero y poder subsistir.
Para Marx esta alienación ocurre solamente en una sociedad capitalista porque según su pensamiento tiene el único sistema económico que puede provocar esta situación. Por tanto, en la sociedad que Marx describe, el hombre está alienado porque no conoce su propia esencia, no se está realizando como persona.Abarca todos los ámbitos de la naturalza humana:social, político, religioso y filosófico. Consiste en la ignorancia del hombre, en la actualidad, el trabajo es su actividad oficial y fundamental, por lo que, en lugar de dirigir la humanidad hacia una realización espontánea, el trabajo paraliza las actividades propiamente humanas e impide cualquier tipo de satisfacción esencial.
En definitiva,el trabajo debería ser, para el hombre, un medio para realizarse y no una obligación para poder sobrevivir. Además debido a que el trabajo se ha convertido en una obligación, el hombre acaba siendo solamente un medio de producción, acaba pareciendo una máquina de producción, simplemente un robot que produce y basta. 


sábado, 28 de febrero de 2015

Quizás también nosotros seamos mentira

Rene Descartes nace en la nobleza baja francesa, aunque vive parte de su vida en Holanda. Es considerado el padre de la filosofía moderna y publicó sus teorías en el discurso del método. Muere en 1650.
 En esta entrada me centraré en su hipótesis del genio maligno que es un recurso argumentativo que este filósofo propone en las Meditaciones Metafísicas. Con él, termina la duda metódica, adquiriendo al máxima radicalidad, aunque también hablaré de la hipótesis del sueño de este mismo. Nuestro filósofo nos sugiere que quizás hemos sido creados por un Dios que nos obliga a engañarnos, que nos ha organizado de tal manera que creemos que vivimos, realizamos y pensamos una verdad cuando realmente todo es un error. Esta afirmación llega hasta el punto de cuestionar las matemáticas, que en ese período eran una ciencia totalmente verdadera.
Aunque Descartes no determinó firmemente que tal genio existiese si tenía un objetivo: investigar si es posible encontrar algo que sea absolutamente indudable: si encontramos una creencia que llegue a superar esta hipótesis, su calidad como verdad será extraordinaria. 

Y ahora intentando alejarnos un poco de lo que es la teoría en sí y reflexionando ¿qué pasaría si esto fuera verdad? Actualmente, está idea ni se considera pues quizás los filósofos posteriores hayan conseguido encontrar un argumento para refutarla, pero pongámonos en el hipotético caso de que este genio maligno o dios engañador existiera e intentara dirigirnos hacia donde quisiera y por consiguiente viviéramos en una mentira, pero creyendo que es verdad. Este genio sería quién decidiría sobre nosotros, quién determinaría nuestro momento final y cuando nos deben ocurrir las cosas buenas y las cosas malas. Como si fueramos las figuras del ajedrez y un dios engañador nos moviera a su antojo y por estrategias.
En cuanto a la hipótesis del sueño de Descartes, es una posibilidad lógica, ya que no es una contradicción afirmar que todo lo que estamos percibiendo sea un sueño o parte de un sueño. Ahora bien, si eso fuese cierto, entonces la fiabilidad de nuestro conocimiento quedaría en suspenso de golpe y totalmente. Viviríamos en un mundo creado para nosotros pero que nosotros pensamos que es real, aunque quizás ni nosotros mismos seamos reales. ¿Quién nos confirma que somos reales, que somos algo y que vivimos en el mundo real? ¿quién nos confirma que existe un mundo real? quizás solo existe "el mundo de mentira" y también nosotros seamos de mentira. 
(Con ser mentira me refiero a no ser reales, al igual que como si viviéramos en un sueño.)

sábado, 10 de enero de 2015

El argumento ontológico de San Anselmo

Ubicamos  a San Anselmo en el primer periodo (periodo de formación )dentro de la filosofía escolástica que su característica principal es subordinar la especulación filosófica al dogma cristiano, quienes anteriormente aprenden a valorar la reflexión filosófcia y la ejercitan y desarrollan, desde un marco fijado por la fe. Aunque nos centremos en San Anselmo y en el periodo donde realiza su argumento ontológico, la filosofía escolástica consta de otros dos periodos: periodo de apogeo y periodo de crisis.
San Anselmo fue, además de filósofo, doctor y teólogo, llegando a proponer una teoría sobre Dios y su existencia tan argumentada que aún hoy se sigue debatiendo.
Su argumento ontológico consiste en hablar sobre la existencia de Dios pero desde un punto de vista deductivo, es decir, sin tener en cuenta la experiencia ni los sentidos. Este argumento ontológico afirma que Dios existe debido a que el concepto de dios ya implica su existencia, es una idea, pues no es material y no podemos verlo ni tocarlo pero el simple hecho de que lo nombremos o cuestionemos su existencia hace que sea, es decir, exista.
Asimismo afirma que concebimos a Dios como sinónimo de perfección, entonces, si no existiera, no sería perfecto y no sería Dios (la idea de Dios que nosotros concebimos) pues sería inexistente y lo inexistente no es perfecto, es imperfecto. Por tanto, si decimos que Dios no existe nos estamos contradiciendo pues es lo más perfecto que hay, y si lo hay es que existe.
Aunque este argumento ontológico sigue hoy en día, ha habido diversas formas de criticarlo:
Por reducción a lo absurdo, es decir que si nosotros pensamos en algo perfectamente perfecto, al ser perfecto tiene que existir, pero si solo existe lo perfecto entonces solo existe Dios, porque es lo único que es perfecto al cien por cien.
Kant, por su parte creía que no debíamos tomar la existencia como un predicado y al no hacerlo no influye el ser perfecto para existir pues puede haber algo concebido como perfecto que no exista. Y tenemos a Dios como lo absoluto, pensamos que nada puede ser mayor que él y aun así puede no existir.
Sin embargo, ha habido filósofos que han elaborado escritos similares a este argumento como por ejemplo: Descartes, Hegel, Spinoza...